Después de la reparación de meniscos: Cómo cuidar a su hijo
(After Meniscus Repair: How to Care for Your Child)
Su hijo necesita descansar la rodilla para que pueda curarse después de la cirugía. En general, retomar todas las actividades habituales suele llevar entre 3 y 4 meses.
Durante una reparación de meniscos, el cirujano repara un desgarro del menisco, un disco de cartílago que ayuda a estabilizar la rodilla y actúa como un amortiguador entre el fémur y la tibia.
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Dé a su hijo todos los medicamentos tal como se las haya recetado el profesional del cuidado de la salud.
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Siga las instrucciones del profesional del cuidado de la salud para retirar los apósitos de la cirugía.
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Su hijo no debe tomar un baño de inmersión, pero puede comenzar a ducharse después de tres días de la cirugía. Envuelva la rodilla en una bolsa plástica y ciérrela con cinta adhesiva para mantener seca la pierna.
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Coloque una bolsa de plástico llena de hielo o una compresa fría sobre la rodilla lesionada, con la frecuencia que el profesional del cuidado de la salud indique. Deje el apósito de la cirugía o una toalla entre la compresa y la piel a fin de evitar lesiones por enfriamiento.
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Si su hijo presenta inflamación, adormecimiento, frío u hormigueo en el pie, afloje la venda que rodea la rodilla y haga que su hijo eleve la pierna con una almohada para que esté por encima de la altura del corazón.
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Su hijo debe realizar ejercicios después de la operación, tal como se lo indique el profesional del cuidado de la salud.
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Su hijo debe utilizar una rodillera o un inmovilizador para mantener la rodilla estirada al caminar; además, debe usar muletas hasta la primera cita posterior a la operación. Su hijo puede colocar peso sobre la pierna afectada mientras use muletas, siempre que no le cause ninguna molestia.
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Los adolescentes que conducen pueden comenzar a hacerlo cuando se lo indique el cirujano y cuanto ya no estén tomando medicamentos narcóticos (que dan sueño) para el dolor. Antes de conducir, se deberá quitar o destrabar la rodillera.
Su hijo:
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No puede orinar (hacer pis) la noche de la cirugía.
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Tiene una inflamación o adormecimiento en la pierna que no desaparece al aflojar la venda y elevar la pierna.
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Tiene mucho drenaje de líquido o sangre en el lugar de la cirugía.
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Tiene una temperatura superior a 101 °F (38.3 °C) en dos mediciones, con una diferencia de 2 a 3 horas, más de 48 horas después de la cirugía.
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Continúa con mucho dolor después de 48 horas.
Su hijo: